El peligro de Internet y las redes sociales

Cuando compartes algo con un amigo/a, pareja... hay que procurar que no sea algo de lo que te puedas arrepentir con el paso del tiempo ya que cuando te mandan algo para que veas no siempre puede ser beneficioso para otra persona por alguna cuestión ya sea de privacidad, por motivos personales u otra diferente.

No hay que hacerse fotos inquietantes y luego que otros lo vayan difundiendo sin que la persona más perjudicada lo sepa, porque esto puede causar daños irreparables a familiares, a la propia persona que aparece en la fotografía o video, etc. Este ha sido el caso de una joven italiana de 31 años que se ha quitado la vida por no poder soportar las vejaciones recibidas a través de la web.





Mi objetivo es que esto no tenga que volver a ocurrir en ninguna parte del mundo, y les doy desde aquí mis condolencias a los familiares, amigos/as... de las víctimas de este tipo de incidentes. Tenemos que empezar a ser conscientes de lo que publicamos y no dejarnos llevar por otras personas para acabar mal cometiendo graves errores.

Los humanos a veces nos equivocamos en ciertas cuestiones pero tenemos que dejar de dar alas a las personas que perjudican a terceros con el fin de destruirles mentalmente o por incidente, el problema es que si no lo dejamos de hacer esto no va a parar nunca, por eso quien lo haya hecho es en parte tan culpable como los que lo hayan distribuido.